viernes, 28 de octubre de 2011

Entren los que quieran



En septiembre vino Pez y tocó gratis en el aula magna de la Facultad de Humanidades. Era uno de esos festivales interminables, con mil banditas antes del número central. Yo llegué a las 12 de la noche y me fui a las 2 sin haberlos visto. El ambiente se asemejaba peligrosamente a un baño turco. Como sucedió con Adiós Sui Generis y Woodstock, a medida que pasen los años, van a ser millones los que dirán que estuvieron "el día que Pez tocó gratis en el Aula Magna". O tal vez sea verdad. Yo vi a todos mis conocidos. Los de la universidad, los de facebook, mis ex compañeros de salita de 5, mis primos lejanos. Era como cuando pasa algo importante en los Simpsons y aparece Springfield entero: Moe, Apu Nahasapeemapetilon, el profesor Skinner, Flander, Lenny, Edna Krabappel.


Ese día se me ocurrió que tal vez no me gustara mucho el rock. No el rock como género, sino como experiencia. El rock de la liturgia y la mística. El rock entendido como misa y tradición consuetudinaria. El rock como actitud trascendental para acceder a una realidad superadora que no es otra cosa que el efecto que produce la música a volumen alto mezclada con el faso y la birra. A diferencia del bolero, el rock es un movimiento cultural. Y en ese festival estaban todos los ejemplos que condimentan la ensalada emblemática del rock. Olor a bolas. Gente con aliento a fernet. Borrachos y drogados cayéndose por ahí. Vasos de plástico con espuma de cerveza caliente. Fragancia a porro de origen desconocido. Neo Hippies. Hippies Chic. Hippies que en realidad son sucios que se hacen pasar por hippies. Y tipos con mucho pelo. Los recitales de rock y los espejos son abominables porque multiplican el número de barbudos.


A determinada hora se formó una especie de niebla que mezclaba el humo de los cigarrillos con el calor de los cuerpos hacinados. Como en la película de Carpenter, la niebla atacaba y las víctimas sufrían graves consecuencias. ¡Algunos rockeros se despertaron y estaban en un laboratorio: ahora eran estudiantes de Exactas y no podían volver atrás! ¡Fue dramático ver cómo muchos grupos de amigos se tomaban de las manos para no perder la tuca que estaban fumando entre 5! ¿Con qué sentido la gente hace todo esto? Sin dudas para garchar. Porque ni la devoción más grande a una banda de rock puede justificar tanto sufrimiento. Daban ganas de encontrar un altavoz e informar: "No se amontonen, muchachos, si se organizan cogen todos". Y eso que hoy, gracias al kirchnerismo (que generó educación, empleo y auge militante), hasta un joven feo recién salido de la secundaria tiene sexo asegurado. Pensemos en un estereotipo más o menos posible: alguien que va a la facultad, tiene un trabajo en un call center y milita. Casi sin proponérselo, es parte de tres "cogederos", es decir, tres espacios con más de 5 personas de cada sexo que se ven por lo menos 2 veces por semana. Queda en cada uno aprovechar el zeitgeist que le tocó en suerte.


La cuestión es que Pez tocó a las 4 de la mañana y yo me lo perdí. Según cuenta la leyenda fue un recital heavy con mayoría de temas del disco nuevo. Pero nada de lo que se diga de ese festival es fiable. Como el final de Lost, cada espectador tiene una versión diferente. En lo que sí podemos ponernos de acuerdo es en que Volviendo a las cavernas es un discazo. La sensación que generan los cuatro primeros temas es notable. Un martillazo de rock atrás del otro. El mejor arranque de un disco en años de rock argentino. El híbrido ferpecto entre el Pez punkie de los últimos tiempos con la vertiente progresiva de Convivencia Sagrada o Folklore. Hay ecos de The Who pero también de Almafuerte. Factores aparentemente superficiales me caen bien a priori como que los títulos de los temas sean larguísimos: "Y por ahí escuché decir que aún existe ese lugar donde todavía hay humanos", "Aferrándonos desesperadamente a lo poco bueno que queda", etc. El leitmotiv del disco (conceptual) es el argumento de un cuento de ciencia ficción: el Apocalipsis ético y natural de un mundo demolido por el exceso de ambición.


Pez autogestiona su obra y hace muy buena música. Al igual que su último disco en vivo (Viva Pez), Volviendo a las cavernas se puede bajar gratis del sitio oficial de la banda. "Entren los que quieran". Pero de verdad.

30 comentarios:

joaquín c. dijo...

ahi entro. como el de mano negra, como sumo, mucho más dicen haberlo visto que estado: en tu caso, es una valentía ser de los primeros en decir que no estuvo.

pero puedo decirte que, pese a todo lo que decís y es cierto, fue un gran chow.

santiago segura dijo...

Contraponer a Pez con Calle 13 hace mejor a Pez? Te parece?
Que son más coherentes, seguro, pero no creo que haga falta comparar a dos grupos tan distintos en sus origenes y sus formas.

No escuché el disco nuevo aún, pero me llama la atención que entre las influencias pueda figurar ¡Almafuerte!

Hay cosas de los shows de rock que son un embole hace rato: y eso que no citaste cantitos como "el que no grita El Mató a un Policía Motorizado para qué carajo vino".

Salud.

no soporto a la gente dijo...

Lo que cuentan las leyendas es de la época de Police en New York City, de Sumo en Los Andes...
Ahora, si te lo perdés, podés verlo en youtube. Como Don Cornelio en Martínez. No es lo mismo, dirán algunos; pero tampoco es lo mismo hablar que chatear, y mirá...

Voy a bajármelo, claro.

Anónimo dijo...

pez no dista mucho de catupecu don corvino

El tropezon dijo...

Quedo clara la diferencia igual calle 13 me parece una mierda, pero no entre a eso si no a felicitarte por el triunfo de Aldosivi deben estar contentos en Mar del plata, al final no se jugo un Jueves frío de agosto, pero el resultado fue el mismo.

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=cXuNmPOdl18
Aquí no estuvo el corvi...
Quizá como intención musical hoy pez se acerque mas al rock que cualquier otra banda.

Anónimo dijo...

Deberias decir que cierta frase de tu texto es una cita a Borges

vdc dijo...

lo de los espejos y los barbudos es increible.
sin citar es más cómico me parece.
creo que garchar es uno de los motivos por los que la gente se funde con la masa pegajosa y de alto volumen. hay algunos que ni para eso. que no saben.
pero todos aplaudimos.
eso sí.

un abrazo
s.-

Anónimo dijo...

Presenciar un recital de Pez, a veces, es como garchar. No siempre.
Creo que nunca fui a un recital de ninguna banda pensando en levantarme una mina, y seguro que nunca lo logré.
Que alguien borre y mande a matar al autor del mensaje "pez se parece a catupecu". Hay gente que habla de más, y hay gente de más.

Martín Zariello dijo...

Pero esto no era un recital de Pez. Apuesto a que el 87 por ciento de los que estaban ahí no van a ver a Pez, era un evento. Explicitar la cita a Borges es redundante.

Anónimo dijo...

"hay gente de mas" solía darme miedo.
por si no sabés parar la oreja y dejar los prejuicios a un lado, mi querido anónimo de las 15:09 del 31, tienen muchos puntos en común: El sonido "crudo" procesado. Los tiempos pares. La búsqueda en las letras (aunque con una diferencia abismal en la forma). Resumiendo: en letra y musica apuntan a un lugar común, que no quiere decir que lo hagan de igual forma y en esto ultimo -forma- la ideología de vida, la marketinezación que haga cada uno con su material y demás cosas que no estén ligadas a la esencia del arte influyen sólo en la forma a partir de algo anterior que la determina; y en esto último (lo que determina), catupeco y pez creo que no distan mucho, obviamente detesto a catupecu y a pez también.

Martín Zariello dijo...

Y a vos qué música te gusta anónimo de las 19:51?

Anónimo dijo...

me gusta más la música que se disfruta con un buen faso que con birra o la mezcla de estos. El vino puede acompañar siempre y cuando que el abuso sea controlado¿será la soledad? cuando estoy con gente me aguanto hasta calle 13

Martín Zariello dijo...

Pez es música de faso.

Anónimo dijo...

Esto último fue una actuación, ni con gente calle 13, salvo estando en un bar sin posibilidad de mover telepaticamente la lista del dj. Toda música nos lleva a un estado, y el estado de la música racionalista de occidente no me agrada por que ante la mínima quietud de nuestra oreja ya se percibe esa rigidez en tiempo y planicie en matizes que sólo la razón aporta al arte. Y no es algo en contra de occidente, por que esta es sólo una cara, en la otra está la verdadera papota (si se me permite esta expresión que sale de una jerga en donde la cocaína no es bienvenida (?) <--- siempre quise usar:(?)

Anónimo dijo...

o sea que desde Bach en adelante no te gusta nada de lo que produje occidente musicalmente?

andá a freír churros! (?)

Anónimo dijo...

produjoooo

Anónimo dijo...

aguante los celtas

jose dijo...

El fan de Pez, con todo respeto, escucha a una banda anti-marketinera y probablemente odia a los Cadillacs -pensando en temas como "gitana".

Además de escuchar a bandas intelectualoides, porque obviamente, son de los que "investigan" en música. Peeero...ni se calientan en ir a buscar discos del amigo Rotman al frente de Cienfuegos -de donde Pez saca el 75% de su obra.

saludos corvino.

Jack dijo...

Me podés expilcar esta frase SS,"me llama la atención que entre las influencias pueda figurar ¡Almafuerte!"

Cuando empiezan a molestar el humo, el olor, etc en los recitales hay que asumirlo, nos pusimos viejos jaja

jorge irrial dijo...

che, por qué te fuiste antes del recital corvino? si se puede saber

santiago segura dijo...

Jack, la influencia de Almafuerte la puso el mismo Corvino. Y, al menos a mí, me llama la atención.

Jack dijo...

Ya sé que lo de la influencia lo puso el mismo Corvino. Mi pregunta apuntaba a si podías decir por qué te llamaba tanto la atención esa afirmación. Es decir, ¿por qué una banda de rock no puede tener de influencia a otra que tiene que ver mucho más con el rock que otras tantas que son incluidas dentro del combo "rock nacional", como por ejemplo man ray

Estopero dijo...

Solo te vengo a decir que Ariel Minimal nombró este post recién en una entrevista en la Rock&Pop con Juan Di Natale, y llegué acá por su recomendación. Salud. Gran recital el de Pez en la facu.

Anónimo dijo...

Todo bien con Minimal , tiene un gran empuje, un "algo", pero la verdad es que Pez en 15 años no ha influenciado a nadie. simplificando mucho es "alternativismo" super-inflado, si hasta tiene un par de discos que parecen attaque 77 con un violero instruido.

Archy

Jacinto Laureano dijo...

A mí me influenció Pez. A quién debería influir? Inflado? Por los festivales? Por las marcas de celulares o gaseosas? Por la rotación radial-televisiva? Por quién?

Anónimo dijo...

inflado por la prensa especializada...

ariel minimal dijo...

hola martín, soy minimal, te mando un abrazo...y todos los que hablaron mal de pez acá arriba me pueden chupar bieeeeeeeeeen la piiiiiijaaaaa.
y no sé, debe quedar bien hablar bien de pez si sos de la prensa especializada....pero te aseguro que nunca ví a un puto periodista en un show de pez....
fijáte si encontrás una puta crítica de un concierto en algún lado...

Anónimo dijo...

Che, Arielito, por respeto al publico escribí tu nombre con las mayusculas correspondientes.

Anónimo dijo...

Arielito, no te alcanza con la sobada de pija que te realizan los de la prensa especializada??