martes, 29 de diciembre de 2015

2015



Enero 


En su Biblioteca Personal, Borges dice que la forma natural del pensamiento de Jesús era la metáfora. Para condenar la pomposidad de los funerales, por ejemplo, Jesús afirmó que los muertos entierran a los muertos. A Bergoglio, como fan número 1 de Jesús, también le gustan las metáforas por eso cuando le tocó opinar sobre el atentado dijo que si alguien insultaba a su mamá, se iba a ligar una piña. 


Mientras tanto los adictos a la narración esquizo de las series políticas de cabecera (Homeland, House of cards) agitan la posta: un enfrentamiento interno de la ex SIDE, organismo sin codificación masiva, en las sombras y, por eso mismo, apto para las más variadas especulaciones (en esto sí coinciden K y anti K). 


Según Eastwood la película está en contra de la guerra. En este punto no se puede dudar de sus declaraciones (y también preguntarse quién podría estar a favor de la guerra: probablemente el mismo Clint Eastwood), lo que sí se puede afirmar es que la película estará en contra de la guerra pero no está en contra de los asesinos de guerra.


Muchas personas desprecian este tipo de películas. Creo que estoy entre ese tipo de personas, pero con PTA hago una excepción. Me gusta pensar en sus películas como canciones de rock con líricas disparatadas en las que el sentido no tiene que ver exactamente con la racionalidad sino con la combinación de elementos y sensaciones que varían según quien los reciba.

Febrero  


Tal vez porque ya había sucedido en el pasado, no le di mucha importancia al retiro de Riquelme hasta ayer, cuando me colgué en un canal deportivo mirando sus goles en Boca. Salvo raras excepciones, eran todos golazos. No sé de cuántos futbolistas se puede decir eso: Maradona, por supuesto, Francescoli, Messi (que ahora le pega con la derecha), Ortega.


Cuatro es el nombre de un nuevo libro de cuentos, publicado en el marco de la colección de narrativa Leer es futuro, del Ministerio de Cultura.

Marzo


Por otro lado nótese que el rock es moralista hasta cuando se droga, sus teóricos nos convencieron de que incluso drogándonos tenemos que tener algún tipo de proyecto a largo plazo, ya sea encontrarle sentido a la vida, hablar con Enrique Symns, hacer Sgt. Pepper’s o tirarnos de un noveno piso.


A nadie le sorprende que un psicoanalista o un abogado escriba en sus ratos libres, eso es lo más natural. Pero puedo asegurar que la idea de que a alguien que trabaja con sus manos (un albañil, un carpintero) se le ocurra escribir se encuentra desterrada de todas las mentes del mundo, por más abiertas y modernas que sean. No los juzgo, yo también tengo el mismo prejuicio. Parece que la escritura es para las personas que tienen una profesión, no un oficio. 


Un día Arroyo se me acercó y me susurró “Alumno, usted parece un hippie”. Todavía puedo sentir el aroma a cigarrillo y jabón que despedía su fabulosa cabeza. Durante la adolescencia eso fue lo más parecido a un triunfo, pensé que aunque sea me parecía en algo a un chico de un colegio cool, de esos en los que los alumnos son lindos, no como éramos nosotros en todas las escuelas a las que fui, flacuchos y dientones, ¡como horribles liebres desnutridas a punto de ser degolladas! Tal vez exagere un poco.


Muchos se preguntan qué le pasa a River aunque tal vez mejor sería preguntarse qué le pasó el año pasado para jugar tan bien y destacarse en forma tan ostensible del resto de los equipos. Probablemente nunca se vuelvan a dar las condiciones para que el equipo brille, aunque sí es factible que se encuentre un equilibrio entre la efectividad ofensiva del principio y la sobriedad defensiva del final (me refiero al semestre pasado).


La lista es eterna, pero mi personaje favorito es Chris Moltisanti, el sobrino de Tony con cara de camello, que dilapida su futuro como Jefe entre la adicción a la heroína, su relación tormentosa con Adriana La Cerva y sus ínfulas de escritor y director de cine. Chris es patético, en las dos acepciones del término: la que utilizaba Borges en sus ensayos y la que usan las chicas conchetas para referirse a alguien insoportable.


Pocas veces sentí tanta empatía con la letra de una canción, es como si Calamaro fuese el genio de los vulgares paraísos masculinos. ¿Qué otra cosa queremos hacer sino escuchar canciones preferidas, ordenar discos y mirar fútbol por televisión? 

Abril


Tanguito salía a la calle vestido con calzas ajustadas que le marcaban el bulto y se ponía una media de red en la cabeza. A veces se vestía de mujer (le robaba la ropa a sus amigas) y algunos dicen que tenía una relación con Tango Bis. En los testimonios sobre Tanguito hay una estética queer (amateur) muy marcada que la historia oficial se encargó de barrer bajo la alfombra deliberadamente. Otra sería la historia del rock argentino si además de Federico Moura, Tanguito se uniera a la constelación de subversivos sexuales.


Ahora bien, ¿por qué filman a Bielsa todo el tiempo? ¿Bielsa no se da cuenta? ¿Bielsa de pronto se copó con la sensibilidad de esta época, que necesita mostrarlo todo, y quiere que lo filmen? En caso contrario: ¿quiénes son los hijos de puta que filman a Bielsa y lo exponen de esa manera? Una cámara es un elemento inquietante que modifica brutalmente el ambiente de cualquier reunión.


Por ejemplo un día Vilas, siendo un niño extraño y curioso, sale a recorrer la ciudad en su caballo y comienza a seguir al sol, que lentamente va desapareciendo en el horizonte. De pronto anochece y cuando se da vuelta no sabe cómo volver a su casa. Pasa unas horas perdido hasta que reconoce la copa de unos árboles y, guiándose por ese detalle, puede volver. 


Es verdad, hay cierto facilismo en la idea de escribir un libro de ensayos sobre el rock o sobre Ortega, Cerati y Justin Bieber: cualquiera sea el resultado, ese tipo de temáticas garantiza algún tipo de lector, tal vez uno solo (tal vez su propio autor), pero lo tiene. El eje programático de Forn (probablemente el mismo de sus notas en Página, algo que no sé porque no las leo) es menos demagógico y más arriesgado. Como Borges en Otras Inquisiciones, en vez de escribir sobre los temas que habla la gente, inventa temas para que hable la gente.


Y es verdad, por momentos Lost River parece surrealismo para dummies, aunque sería interesante hacerse la pregunta que nadie se hizo jamás por miedo a que los fans de Spinetta nos enojemos: ¿a quién carajo le gusta el surrealismo?, ¿por qué se cree que algo surrealista es naturalmente bueno?, ¿de dónde viene el prestigio del surrealismo?


En determinado punto de la entrevista Cabral tomó un vaso con agua y lo elevó. Cuando todo hacía pensar que se iba a referir a la eterna disyuntiva sobre el vaso medio lleno o medio vacío, dijo: “Algunos pueden pensar que en una de mis dos manos tengo un vaso lleno de agua; otros pueden pensar que una de mis dos manos está ocupada y no la puedo utilizar”. Claro, pensé, ¡lo importante no es el vaso, es la mano! Nunca se me había ocurrido pensar así.

Mayo


Aunque de los tres partidos éste era el menos importante ya que no representaba ningún tipo de eliminación (River quedó a tres de la punta en un torneo interminable y perdió el clásico, es cierto, pero en La Bombonera) la sensación es que a Boca, con poco (ya que no fue su mejor partido ni mucho menos) le alcanzó para ganarle merecidamente al mejor River disponible en este momento.


Recordemos que la hegemonía boquense en Superclásicos iniciada en los 90 tiene más condimentos anímicos y psicológicos que futbolísticos. Esto no le resta virtudes a la pegada de Riquelme o al olfato goleador de Hugo Romeo Guerra, lo que quiero señalar es que River no sólo perdía en el marcador y para las estadísticas sino también en cuanto a espíritu. Ganaba y se lo daban vuelta. Llegaba más pero sufría de contraataque. Buscaba todo el partido y se quedaba sin fuerzas en el final. River parece estar dando vuelta esta dinámica a las patadas (literalmente), lo que contrasta un poco con el estilo de su prestigiosa escuela de juego. Esta versión de River incomoda muchísimo a sus hinchas. Tanto como a los de Boca verse cagados a patadas...


Hace poco enganché un viejo capítulo de Friends y me di cuenta que mirándolo como un espectador neutral, desconociendo el pacto de verosimilitud que propone la serie, se trataba de personas grandes hablando como los actores de Amigovios. A la distancia es imposible no ver en Friends y en el mito de Kurt emergentes muy marcados de la muerte de la adultez, cada uno, por supuesto, ubicado en uno y otro extremo de la cultura de los 90.


Si el funcionamiento de Alexis Sánchez se limitara a sus arranques, creo que estaríamos ante el más grande jugador de la historia. En River ya no quedan de esos dementes. Pero hay de los otros. Tipos como Vangioni o Funes Mori, que son como esos asesinos profesionales de Tarantino, que no sólo van a matarte, sino que van a disfrutar mientras lo hacen. ¿Cómo les van a sacar una tarjeta roja? Sería discriminación. Estos tipos son víctimas de la sociedad.


Durante mucho tiempo el fútbol sostuvo nuestra vida. Las miserias públicas e íntimas fueron compactadas y comenzaron a aflorar intensamente en cada partido decisivo. Como si el fútbol fuera el conducto fluvial por donde se va toda la mierda de nuestro espíritu. Ahora el fútbol quedó demasiado lejos de lo que proyectamos que es. Como si el significante estuviera en Tierra del Fuego y el significado en La Quiaca. Ir a la cancha es asistir a las inmediaciones de una tragedia: policías con caballos, hinchas reventados que te apuran por unas monedas, corridas, humo.


Las imágenes tienen, casi por protagonista absoluto, a Riquelme. Riquelme y Aimar abrazándose. Riquelme y Aimar riéndose. Riquelme festejándole el gol en la cara a Ramón Díaz en la Bombonera. Debo haberme equivocado porque creo que hasta hace muy poco Riquelme era apenas un gran jugador con serios problemas de comportamiento y el vestuario de Boca se había visto notablemente confortado con su ausencia.


La vuelta en Brasil se percibe complicada. Un pase a semifinales, a jugarse a fines de julio, pertenecería a otra dimensión. Ganar por dos goles para un equipo con semejante imposibilidad ofensiva sería una hazaña. O sea: es un partido que arrancamos a jugar desde la perspectiva de Los Pumas. Y Los Pumas casi siempre pierden.


¿Dónde jugarán las niñas? es un disco histórico y genial pero, como muchas otras obras cumbres del rock, sólo puede ser entendido desde la agitación cavernícola de la adolescencia y en una época determinada. Actúa como Vida, de Sui Generis, pero desde el lado oscuro de la fuerza. Recién Molotov cerró los festejos por la Revolución de Mayo. Cuando tocaron “Puto” sentí algo muy similar a la madurez. 


Creo que estamos en un país en el que es más importante hablar de fútbol que mirarlo. A mí particularmente me encanta hablar de fútbol. Soy capaz de arruinar reuniones concurridas recordando que Maisterra jugaba en Platense y Ramón Díaz y la Copa Interamericana y algo que ya me olvidé pero era lo importante de esa historia. Mi mente es una serie de archivos con partidos, jugadores, goles, canchas.

Junio


Ahora bien ¿qué se puede decir de un equipo que cuenta con Messi, Neymar y Suárez? ¿Representaría algo así como el espíritu amateur en el fútbol? ¿Traducidos al fútbol argentino serían Deportivo Riestra? ¿Esa es la última esperanza del fútbol? ¿Una multinacional catalana que puede contar con el mejor argentino, el mejor uruguayo y el mejor brasileño mientras las ligas de los países de esos mismos cracks no tienen un solo tipo que exprese futbolísticamente el diez por ciento de ellos?


A y B comparten un gran secreto que involucra a C. ¿En qué lugar del mundo A y B hablan en voz alta y con lujo de detalle del secreto a pocos metros de C, que interrumpe la escena y pregunta de qué estaban hablando? ¿Y en qué lugar del mundo, C, estando tan cerca y con sus oídos en funcionamiento, jamás puede escuchar lo que hablan A y B? En una serie de Polka.


Nunca es tarde para ilusionarse con Messi. Total el que tiene que sublimar todas nuestras miserias cotidianas es él. Nosotros no podríamos hacerlo de ninguna manera, sino ¿quién fabricaría miserias cotidianas?  


Siempre me hago una pregunta: ¿si yo tengo un blog quiere decir que alguien, en algún lugar del mundo, todavía tiene un fotolog o un Tamagotchi? Tengo la extraña sensación de estar atrapado en algún tipo de atesoramiento anacrónico. 


¿Nunca se dieron cuenta de que Tevez es un tremendo bardero? Y lo digo con la simpatía que me causan muchos de sus bardos. Un equipo de fútbol también es un grupo de seres humanos que se tienen que llevar bien. Simplemente Sabella debe haber visto el partido contra México del Mundial 2010 en el que Tevez manda a la mierda a ¡Maradona! porque se anima a reemplazarlo y debe haber preferido que Lavezzi le “acabe” una botella de agua en la cara. Es una opción menos riesgosa.

Julio


Messi tiene otra velocidad, otro panorama, otra forma de pegarle a la pelota, otra forma de vivir los partidos. Es un jugador diferente, en el sentido real, positivo y superador del término. Cuando ya no juegue el fútbol argentino va a ser un desierto.


Once minutos y tres segundos dura un viaje en colectivo al laburo. De hecho once minutos y tres segundos pueden significar la cuarta parte de un viaje en colectivo al laburo. Once minutos y tres segundos es el tiempo que pasamos doblando la ropa que se secó en el tender. Once minutos y tres segundos pasan mientras no encontramos nada en la tele o en YouTube. Once minutos y tres segundos suceden todo el tiempo y nadie hace nada. Incluso no lo quería decir pero once minutos y tres segundos pasan mientras el hipotético lector lee esta porquería. 


Lo que hace Nicole Kidman en esta película es escalofriante. Es una hija de puta tan monstruosa que uno se pregunta si Nicole no será así en la vida real. Empastillada y dura, va por ahí diciendo todo lo que no tiene que decir y mandándose cualquiera. Pero lo más atractivo es la fragilidad psicológica del personaje, que contradice su aparente crueldad. En una escena trepa a un árbol y después no sabe cómo mierda bajar. Es como Talita subida al tablón pasándole yerba al boludo de Oliveira. 

Agosto


¿Qué porcentaje de fans de Beck escuchan a Mac DeMarco? En caso de que tales fans existan, claro. ¿Cuánta gente se reuniría en el Obelisco si se juntaran todos los fans de Beck en Argentina? Alguien debería escribir sobre eso. Es más: alguien en algún lugar de Almagro tiene una beca y está estudiando eso. Sobre qué porcentaje de fanáticos de Pappo escuchó la obra de Spinetta. Y viceversa. Supongo que hay más fans de Spinetta que escucharon a Pappo que fans de Pappo que escucharon a Spinetta. Lo supongo pero no lo sé. Ahora bien: ¿para qué servirían esta clase de informes?


De repente todo lo que pasa es fucking hermoso, como si el encargado de diseñar el mundo fuera Atilio Costa Febre. Es hermoso que uno de los encargados de manejar el fútbol sea Enzo Francescoli y no el Monje Negro. Eso hace pensar que si las cosas están hechas por buenas personas todo puede ir mejor. Es hermoso, una vez más, que Gallardo sea el técnico que saca campeón a River después de 19 años, porque no fue valorado en su momento y porque los bosteros finalmente no pudieron arruinarle la carrera. Se hizo justicia.


Tal vez puede pasar que esto exista para todos, pero no como creemos, en un mundo tangible llamado Planeta Tierra, sino que simplemente nos encontramos atrapados en el sueño de un Dios inescrutable o acaso en la mente de un bebé. Tal vez las mentes de los bebés contengan galaxias enteras; aunque es imposible no preguntarse ahora si los bebés que forman parte de nuestra realidad a su vez contienen galaxias. Eso sería muy complicado de entender, incluso para mí que lo estoy imaginando. 

Septiembre


De todas formas la política que determina nuestra vida no es la de los programas de TN, sino la que llevamos a cabo día a día. Cómo somos cuando manejamos un auto, cómo somos cuando estamos en la calle, cómo somos con las personas que nos cruzamos en nuestra vida cotidiana: eso es lo que hace que una sociedad funcione y avance. Yo soy un ser humano egoísta y apático, no tengo derecho a quejarme si no doy el ejemplo en nada. A veces le pedimos a Macri lo que no nos animamos pedirnos a nosotros.  


Una de las características que hizo a Melero un músico con un estilo es la subrayada contradicción entre las líricas románticas, que no temen apelar a la cursilería y a la simpleza (con excelentes resultados), y los sonidos más bien desprovistos de calor, marciales: el traqueteo constante de las máquinas. Ese cruce de sensibilidades perfuma la música de Melero de una manera muy especial. ¿Música para bailar triste? No siempre. En fin. Los Encargados parecen encarnar la idea de ser Virus sin onda. En el único disco de la banda, Melero registra la que tal vez sea su mejor canción, lo que ya es mucho decir. 


A veces C aparecía en la puerta de casa y volvíamos a jugar como si no hubiera pasado nada. A veces ella quería hablar de mis problemas con las pandillas pero yo me negaba. A veces nos pedíamos perdón y a veces nuestros hermanos mayores o nuestros padres nos obligaban a pedirnos perdón.


Este aquelarre de patadas me recordó a Crash, esa película de Cronenberg donde un grupo de freaks comienza a rondar y concebir accidentes de autos porque sienten una atracción erótica por las heridas, las cicatrices y los hematomas que provocan. Es decir, si tanto se repiten las imágenes violentas es porque a alguien le produce placer contemplarlas. Pero ¿a quién le puede producir placer ver ese tipo de imágenes?


Por eso me parece productivo leer a Casas desde el supuesto consenso (que él mismo echó a rodar) de su falta de imaginación: porque cuando empiezan a suceder hechos inesperados, el shock poético es doble. Es como la sensación ramonera de que alguien puso algo en nuestro trago y estamos viendo cosas que sólo existen en nuestra mente.


Ya lo dijo Saussure: en realidad no recuerdo exactamente qué dijo ni cómo lo dijo, tampoco sé si mi interpretación es válida pero la cuestión era que el valor de un signo se mide en base al valor de los demás signos.


De los Cadillacs de los 80 y principios de los 90, más que los discos como obras acabadas, me gustan algunos temas puntuales: "Contrabando de amor", "Silencio hospital", "Siempre me hablaste de ella". Lo atractivo de esos Cadillacs es que, al parecer, entre lo que querían hacer y lo que finalmente hacían había una gran distancia que de todos modos era atractiva. Eran como esas bandas o escritores o directores de cine que inventan una estética de carambola.

Octubre


La escuela deserotiza, vuelve todo inofensivo. ¿Van a explicar las uvas viejas de un amor en el placard? ¿Van a analizar por qué un doberman verde en el iris de tus ojos te viene a lamer? ¿Van a llenar cupones para ganar la rifa del viento?

Si dieran pornografía en las escuelas, los chicos ya no se harían la paja.


Las declaraciones de Luca son divertidas pero creo que son el germen de ciertos enfrentamientos y rivalidades que, cuando no sirven para escribir o discutir sobre música, generalmente se parecen bastante al fascismo. Hay personas que están en contra de la policía pero que actúan como una especie de policía cultural que determina lo que está bien y lo que está mal escuchar. Es muy raro eso.


¿Es muy descabellado suponer que tanto Macri como Scioli, tanto Arroyo como Pulti son nuestros enemigos aunque curtan distintos boliches? No sé a qué escuela fueron ustedes, qué amigos tuvieron, qué música escucharon, qué libros leyeron, qué novias/novios tuvieron, qué no quisieron ser de grandes cuando eran chiquitos, pero esos tipos siempre fueron nuestros enemigos y no hay vuelta que darle. Una cosa es votarlos porque no queda otra pero de ahí a subordinarse a sus estructuras de pensamiento hay un largo y sinuoso camino. 


Es verdad, no está pasando su mejor momento, pero a esta altura del año casi nadie pasa su mejor momento. O sí, hay personas a las que les gusta la primavera, hay a las que las estaciones les hacen cambiar el humor notoriamente. ¿Balanta será de esas personas? No lo sabemos. Y otra pregunta: si la primavera avanza y el clima no es el apropiado para la primavera, la persona a la que la primavera le cambia el humor ¿le cambia el humor?


Nunca entendí si la equivocación es deliberada y propia de la adolescente confundida de la voz narrativa, si Piglia no sabía que “La grasa de las capitales” era de García o si Piglia (¡y esta hipótesis es tan paranoica que podría ser del propio Piglia!) se “equivocó”, justamente, para que "personas" como yo se pregunten esta clase de cosas treinta y cinco años después. Si lo hizo por eso merece muchos aplausos.  


Comienza a  ganar fuerza la idea de comunidades autoabastecidas. Exiliarse en el Uruguay o por lo menos en Santa Clara del Mar. Pensar que la revolución es subjetiva. Volver al mundo interior. Practicar la introspección. O como decía Leo Masliah: “hágase autista”.


Lo que decía Carrasco restándole lo que escuché en TN más la intervención 1223.a de Nora Veiras en 678 menos lo que me dijo mi tío en año nuevo del 2012. Eso es lo que pienso del kirchnerismo.

Noviembre


En fin, todo se parece demasiado a ese chiste que dice que sólo existen dos partidos políticos: los optimistas y los pesimistas. Los optimistas dicen que todos comeremos mierda y los pesimistas dicen que la mierda no va a alcanzar para todos. Mientras tanto, la máquina de pensar en Macri está enchufada y produce el suave ronroneo habitual.


Sé que para muchos hablar sobre signos es peor que hablar sobre libros de Paulo Coelho pero yo disfruto mucho la narrativa de los signos, más como literatura que como verdad revelada. Además es imposible no sentirse identificado con la semblanza de tu signo porque los que las escriben ponen tantas cosas geniales y horribles que uno no puede menos que estar de acuerdo con la idea de que somos sujetos complejos, geniales y horribles al mismo tiempo.


En determinado momento los periodistas dicen que en realidad el problema es que los hinchas de la Selección son familias. En determinado momento la gente odia a Messi. En determinado momento pensamos que indudablemente vamos a ser campeones del mundo. En determinado momento suponemos que tiene que volver Bielsa y que hay que pedirle perdón por no ser como él. En determinado momento Argentina empieza a ganar los partidos y ya a nadie le interesan las Eliminatorias.


¡Malditos hijos de puta, miren lo que hicieron! Lo digo cariñosamente, como se le dice hijo de puta a alguien que hace algo muy retorcido e ingenioso y merece, más que nuestra animosidad, nuestro admiración. Nosotros no teníamos nada que ver. Habíamos mirado CQC, habíamos mirado Chiquititas, estábamos neutralizados contra cualquier compromiso, más no sea simbólico. No fue Néstor, fue ese que está al lado de Mariano Grondona. 


Modo Correcto:

“¿Te acordás de Mauricio, el que salía con Mónica?, se fue a vivir a Estados Unidos”.

Modo Incorrecto:

“¿Te acordás de Mauricio, el que salía con Mónica?, es presidente de la República Argentina”.


Otro lugar común que se puso de moda es que hay que apoyar al nuevo gobierno porque "si le va bien, nos va bien a todos". Lo que para un gobierno puede ser un éxito, para el país puede ser desastroso. Simplemente quienes no votamos a Macri tenemos que atenuar nuestros prejuicios y miserias para no ser como quienes hicieron del antikirchnerismo un modo de vida.

Diciembre


Los colectivos y sus dinámicas de sucesos. Durante muchos meses no sucede nada. Mismas caras. Mismos gestos. ¡Mismos asientos! Mismos muchachos con pantalones sucios de la clase trabajadora argentina. Mismos empleados sexagenarios, con cuerpos de rinocerontes, vestidos con camisa y corbata. Mismas chicas cada más vez más bellas en su actitud "chicas bellas que suben al colectivo y no miran a nadie" que es la actitud que yo tendría si fuera una chica bella.


Que el kirchnerismo termine con el interrogante más sorpresivo y más absurdo de la historia argentina no es casualidad: ¿hasta qué hora es presidente un presidente? Por un lado, en la problematización de un evento protocolar se nota el viejo truco de ponerlo todo en una zona de incertidumbre. Por otro, ahí está el desgaste de una forma de hacer política que se pasó de rosca y derivó en su propia parodia. Tal vez la "gestión" de Macri esté atravesada por otra pregunta, no menos sorpresiva ni absurda: ¿hasta qué punto es presidente un empresario?


Es como si Charly abriera una puerta y dijera "es por acá": por el lado de la libertad, del amor, de la apertura mental, de la imaginación. El mismo Charly puede haberse cagado en esos mismos preceptos pero eso no es problema de su obra. Como con Borges y con Piazzolla, su obra trascendió a su persona.


Me encantan los hinchas de River que dicen que prefieren jugar con el Barcelona y con Messi y Neymar en cancha. ¡Hijos de puta: ¿por qué no juegan ustedes?! ¡Yo prefería jugar contra los chinos! Los canales de deportes se llenaron de especiales en los que te muestran cómo ataca el Barcelona y cómo debería hacer River para "anularlo". Eso es como intentar sistematizar la creación de poesía. Lo único que me queda claro después de esos informes es que el Barcelona va para adelante y te caga a goles. 


Pero al mismo tiempo, a nivel poético (¿o político?), hay algo injusto en un equipo europeo que destroza a uno de Sudamérica con el mejor argentino, el mejor brasileño y el mejor uruguayo (sin contar a Mascherano y Dani Alves, que tal vez sean el segundo mejor argentino y el segundo mejor brasileño).


En un mundo sin dilemas el crítico debería escribir con su propia sangre. De hecho el crítico debería ser como una abeja que descarga su aguijón, muere y es reemplazado por otro crítico/abeja que también descarga su aguijón y muere y así hasta el infinito.



3 comentarios:

Pedro dijo...

Corvino te imagino en tu cuarto a solas, tomando un té con hielo y recortando fragmentos de tus propios textos. Feliz fin de año igual a vos y a la manga de macristas que comentan acá, gracias por las letras y por el espejo.

Anónimo dijo...

River, Arroyo, García, Spinetta: las obsesiones del Corvino.

Que tenga un buen fin de año... salud!

el hijo de Arrostito dijo...

River, García, Spinetta, te faltan Muhammad Ali y Perón, y este sería el blog perfecto.

Por un 2016 más feliz que 2015.

Abrazo de gol!