PROBLEMAS DE REPRESENTACIÓN DE LAS PELÍCULAS Y LAS SERIES MALAS

Problemas para representar una banda de rock en vivo. Si la banda a la que se alude es de los 70’, su estética parecerá de los 90’; si la banda es de los 80’, su estética evocará los 60’ y así hasta aludir incorrectamente a todas las décadas de la Humanidad.

Problemas para que uno de los personajes recite poesía. Incluso por cada película con recitador de poesía se crea un nuevo y hasta entonces insospechado problema para representar la recitación de poesía.

Problemas inenarrables para abordar la historia de Lennon o The Beatles. Ya es ley que las películas sobre The Beatles sean malas o muy malas o vomitivas o intolerables a la vista.

Problemas para hacer de cuenta que llueve.

Este punto se puede relacionar con el anterior: problemas para que los personajes mojados no se sequen en un minuto.

Problemas para representar a un punk siendo un director no-punk.

Problemas para representar una discoteca repleta en buen grado.

Problemas para la representar la habitación de un adolescente. Si nos guiamos por determinadas películas, los adolescentes siguen adornando sus piezas como en 1985, aunque es probable que la representación de 1985 también sea errónea. Abundan incontables pósters de películas.

Problemas para representar una discusión creíble entre alumno y docente.

Problemas para representar la fisonomía de los escritores –como si éstos tuviesen una. No hay eslabón intermedio entre un modelo despeinado y un viejito con maletín.

Problemas para representar una sesión de fotos convincente.

Problemas para representar el baile de un personaje y que éste –el baile- no parezca arbitrario, absurdo, patético, anodino.

Problemas para abordar el peronismo y sus múltiples facetas con dinámica, cohesión y coherencia. Caso parecido al de The Beatles.

Problemas para representar escenas históricas con próceres: la barba siempre es artificial, los personajes sólo se comunican con sentencias rimbombantes y efectúan profecías calamitosas de no darse lo que, obviamente, no se dio.

Problemas para que Angelina Jolie haga una buena película –y que lo bueno de la misma no se relacione directamente con la desnudez de Jolie.

Problemas indecibles para representar un ladrón.

Problemas para representar un niño pobre que vende estampitas en los transportes públicos.

Problemas inobjetables desde cualquier punto de vista para representar un partido de fútbol donde los jugadores jueguen de verdad al fútbol y no parezca que se está haciendo mímica.

Este punto se puede relacionar con alguno anterior: problemas para representar la vida de un barbudo célebre.

Algunos actores son tan malos que les sale mal hasta caminar de espaldas a la cámara por lo que se agrega un nuevo problema: problemas para representar una espalda.

Problemas para representar presidentes latinoamericanos sin loros, ni bigotes, ni habanos.

Problemas para representar mexicanos, árabes, italianos, judíos, rusos, brasileros y franceses sin caer en estereotipos visuales de tinte demagógico y racista.

Problemas para representar argentinos, ecuatorianos, chilenos, canadienses y países así, que no tienen nada muy propio ni muy ajeno en la constelación mundial del estereotipo estético de las Naciones.

Problemas para representar hackers.

Problemas para que los personajes griten en forma convincente.

Problemas para que los personajes mueran en forma convincente –a propósito: Brando era tan buen actor que podía hasta pegar un chicle en un balcón y luego morir sin problemas.

Problemas para representar una charla de eruditos o intelectuales sin que ésta no parezca forzada, desafortunada, a propósito de nada. Ejemplo:
-Buen día.
-El estructuralismo es binario.

Siempre el sexo es un gran problema en una película mala.