jueves, 11 de septiembre de 2008

SOBRE LA SELECCIÓN

“¡Qué desastre: Argentina volvió a empatar!” decía un recuadro en el canal Crónica a las 3 de la mañana. Por más que sea un chiste: ¡Qué pelotudez: hacerse algún tipo de problema porque un grupo de millonarios está pasando por un mal momento deportivo! Además Argentina siempre tiene dificultades en las Eliminatorias (recordar el agónico empate 2 a 2 contra Perú en el 85 o buena parte de la era Passarella). Y por otro lado: ¿por qué no habría de tenerlos? Hay que terminar con la idea de que somos un gran equipo, de que Messi es el mejor, acabarla con la Gran Idea, la del Fútbol Argentino. El polaco Grombowicz decía algo inteligente sobre la literatura argentina: “El argentino auténtico nacerá cuando se olvide de que es argentino y sobre todo de que quiere ser argentino; la literatura argentina nacerá cuando los escritores se olviden de Argentina". Trasladado al fútbol podríamos decir que el fútbol argentino renacerá después de su etapa maradoniana, cuando se olvidé que alguna vez estuvo en la cima y fue reconocido. Batistuta, Caniggia, Maradona. Muchas piensan que aún el equipo nacional conserva ese cúmulo de comedia, fútbol y potencia. Pero no. Incluso con esos tres juntos no se ganó ningún Mundial, ese torneo que tanto nos desvela. Messi es un jugador de gran habilidad y con una aceleración inaudita que empalidecería a la mismísima “Máquina de Dios”. Pero además de eso sólo tiene 20 años y una considerable falta de carisma (no se va cantar una cumbia ni va hacer un chiste en una conferencia de prensa). Tal vez su Mundial no sea el del 2010, sino el del 2014. Quizá no tenga nunca un gran mundial, qué importa. Es como esos tipos que escriben muy bien, pero a los que les falta una buena historia para contar. Desparrama 4 jugadores y se la da al contrario. Llega al borde del área y define mal. Roba una pelota increíble y no sabe qué hacer con ella, sus pies parecen ir más rápido que su cabeza. En una posición confusa, criticado excesivamente por Maradona (con quien lo comparan cada vuelo de mosca), tildado de estúpido o abúlico por la opinión pública, desconectado de sus compañeros, con una tarea que lo excede en su club (hacerse cargo del Barcelona luego de la venta de Ronaldhinno), con una cuenta bancaria que a cualquier ser humano desconcentraría de su tarea, es factible que juegue partidos como los de esta semana. Lo extraño es el planteo de Basile (quien a través de sus gestos atribuye el errático itinerario de los últimos 5 partidos a la mala suerte), la absoluta indefinición en todas las líneas de juego. Puede que haya más jugadores de fuste para un eventual recambio; probablemente Basile no tenga muchas ganas de buscarlos. En la defensa lo único que se sabe es que Demichelis usa un buen champú y juega de 2, el resto es una neblina espesa, como la de la película de terror que se estrenó este año: ni el asombrosamente convocado Cata Díaz es 3, ni Coloccini ha demostrado poder jugar en todos los puestos, ni Zanetti (a quien vendría bien buscarle un reemplazante) está en su mejor momento (carece de proyección, marca y velocidad -tres atributos fundamentales para un número 4-, aunque no de su típica calesita). ¿Por qué los técnicos argentinos creen que un 2 que apenas puede con su puesto puede jugar de 4, de 6 y de 3? El medio (después de la lesión de Gutiérrez) fue una locura: Battaglia, un gran 5, de 11 no va “ni ahí”, Gago está jugando en un buen nivel pero no tiene la marca necesaria para hacerse cargo del círculo central cuando no juega Mascherano, Cambiasso nadie nunca supo de qué y por qué juega. Yo creía que era un modelo de la agencia Pekerman, como Sorín, pero Basile lo siguió convocando. Poner a los tres juntos y diseminarlos con los ojos cerrados hacia los costados tampoco es buena idea. O sí, es una idea suicida (estamos hablando dentro de los límites del fútbol, ok). Riquelme es un jugador sensacional pero hace meses que no aparece. Se comprueba observando lo poco que Boca lo extrañó durante este mes. Está lento y parece obsesionado con pasársela a Messi, aunque el 10 del Barcelona esté abstraído mirando la luna o el banderín del corner izquierdo. Incluso la pelota perdida de Messi que derivó en el gol peruano, vino después de un pase kilométrico de Juan Román. Agüero no tiene el físico ni la torpeza técnica de un centrodelantero neto, por eso no hace goles, ni la toca ni aparece. Si nos conformamos con que un jugador de sus características haga goles cada tanto estamos fritos. También es verdad que los medios lo victimizan cuando juega mal: nunca es su culpa. “Pobre Agüero”, decían ayer, “está jugando solo contra 3 peruanos”. Teniendo en cuenta este panorama donde más que equipo lo que se observa es una agrupación dispar, la combinación de jugadas entre los intérpretes es literalmente inexistente, es decir, la Selección no puede lograr algo esencial: jugar al fútbol. Argentina no creó jugadas de peligro en los 90 minutos. El festejado gol de Cambiasso fue un premio demasiado excesivo y el empate en tiempo de descuento por parte de Perú (espantoso escuchar a Niembro y Closs regocijándose) puso las cosas en su lugar. Ya al promediar el primer tiempo, cuando se entendió que Perú era un equipo dignísimo pero con total ausencia de estrategias ofensivas, la Argentina comenzó a jugar un partido contra sus propios fantasmas. El partido real fue un triste empate, el simbólico (que viene jugando desde hace años) fue goleada en contra. Abrazo de gol.

10 comentarios:

David dijo...

A mi ésto me da pena, principalmente pena. Ante todo pena.
Me da pena que los buitres de turno tengan comida para caer sobre la selección, pero bueno, el coco seguirá siendo tribunero eternamente y eso nos escupirá sus correspondientes consecuencias. La idea de los intocables no va, como así tampoco la otra, la del borrón: Heinze se mandó una cagada que no me la mando ni yo con zapatos de bowling, pero bueno, crucificarlo de esa manera es ganarse la mirada desconfiada de los compañeros.
Al margen de si Riquelme y Messi son Dios o Patrulla Giménez, cuando el partido no se presta para ellos hay que cambiarlos y punto, buscar variantes, meter cambios, quemarse la cabeza un poco...Pero no, el muchacho con pinta de postino digue descansando en eso de que "soy un afortunado por tener a estos jugadores, ¿de qué presión me hablan?". Y ahí vos ya empezás a notar difuso el límite entre el convencimiento y la tosudez

Coincido con vos respecto a lo de Battaglia, también con lo de Zanetti, Zabvaleta sería una buena opción, lo mencioné alguna vez acá antes de que se inicien las olimpiadas, o apenas empezadas. Es cuestionable poner a esos laterales; jugadores de alto nivel pero en otro puesto, marcadores centrales. Y sabés, me parece ok que los técnicos intenten hacer ésto de convertir a alguien "polifuncional" pero me resulta contradictorio quejarte de que no tenés tiempo y cuando juntás a los jugadores hacés un experimento táctico, no sé, me resulta incoherente.
Repito, me da bronca proque yo quiero que la selección gane, independientemente de si el técnico es Bianchi o Ramón Díaz, pero bueno, tampoco se puede defender lo indefendible, y la mano del coco está acomodando la fichas con muchos errores.
En fin, nuestra selección lejos está de funcionar como equipo y eso nos molesta más que nunca porque sabemos que hay jugadores como para tener un funcionamiento apropiado.
Por último, y para culimar el despilfarro, me animo a decir que Argentina perdió a uno de los tres mejores incipientes "NUEVE" que había en nuestra tierra: Darío Cvitanich, se lo discuto a cualquiera.
Saludos.

Anónimo dijo...

Hola Martín,
no sé si ya te lo comentaron, pero quería decirte que anoche en la charla de Talando árboles 2008 (http://www.interzonaeditora.com/newsletters/08-2008-talando-arboles/index.html), Fabián Casas mencionó tu blog como ejemplo de algo bueno dentro de la diversidad de oferta que hay en la blogosfera y sólo te mencionó a vos. Me hizo bien compartir ese gusto con él porque te leo desde hace tiempo.
Mañana posteo una crónica del evento en LLP.
¿Tenés inconveniente que te linkee, sobre la mención?
saludos,
APG

Hernán Galli dijo...

¿Grombowicz sería un ejemplo de "esos tipos que escriben muy bien, pero a los que les falta una buena historia para contar"? !!!!!!!.
Che, felicitaciones por lo de Casas! Un capo.

Saludos!

Anónimo dijo...

Che no pongas esas fotos que recién comí...

Gonza Averna dijo...

Tenés razón en lo que decís de Carrizo. Pero bueno, mientras ataje como ayer, o mientras ataje más que Abbondanzieri, que tenga todo el amor propio del mundo.

Espero no ver nunca más el triple cinco, mamarracho táctico si los hay.

Y por último, no puede ser que para que entre Denis... ¡Salga Aguero! ¿Tanto es el miedo a no hacer goles que jugamos todo el partido con un delantero solo los 90 minutos?

Saludos che.-

Matías dijo...

Está todo trastocado cuando a un juego en su mayoría de azar -como es el fútbol- le exigimos una previsibilidad cien x cien.

Pero lo irracional desborda el cuadrado de la cancha y pasa a jugar más allá de la línea lateral:

lo que vos dijiste, el hecho de que, mientras a muchos le falta lo mínimo, un jugador sea millonario.

Felicitaciones por lo demás.

Martín Zariello dijo...

APG: Recién me entero, no hay ningún inconveniente sobre la mención o el link-
Eddie: Coincido en que está mal crucificarlo a Heinze, la cagada es de Basile, desde hace mucho el tipo se manda cagadas así: me acuerdo del partido contra México en el mundial, hizo una falta en la puerta del área, lo tendrían que haber echado.
Galli: leí poco de Grombowicz, varias cosas publicadas en internet de su diario, pero ninguna novela. La frase la saque de...un libro de Lanata!
Saludos a todos, gracias por leer!

David dijo...

Si, patadón con las piernas hacia adelante en el primer tiempo, todo un criminal.
En fin, veremos como sigue ésto, aunque bueno, julito Grondona también debería marcharse.
Lo bueno es que para la fecha próxima de eliminatorias los ojos del mundo estarán centrados en el recital de stone temple pilots.

El anacoreta dijo...

Il corvino (¿pq no il gallina?):
Me parece que esa gente que le pagan por decir las mismas, o aún más, boludeces que decimos nosotros en un bar (o un blog), se detienen demasiado en denostar a los pobres (¿?) jugadores cuando acá el único que tiene la culpa de lo que pasa es el técnico. Me hicncha las pelotas ver al tipo más preocupado en ponerse el polvito mágico en la cara o en que cada ayudante este sentado en estricto orden. Y mientras tanto ver un equipo con un nueve que mide un metro y medio, un medio campo con tres cincos y laterales que no pueden hacer dos metros con la pelota.
El principal problema de la seleccion es que depende totalmente de la iluminación de Messi y Riquelme que si no estan correctamente rodeados no pueden hacer milagros. El polvito mágico creo que tampoco.

towa dijo...

BUEN POST PADRE!