lunes, 20 de mayo de 2013

El milagro Cerati


El día que Spinetta reunió a sus bandas eternas también estableció su canon personal. Los invitados fueron innumerables. A medida que fue avanzando la noche Spinetta elegía palabras cada vez más extremas para describirlos: "genio", "perla", "talento", etc. Cuando se quedó sin adjetivos empezó a repetir y convirtió todo en un stand up rockero muy gracioso. Gustavo Cerati fue un mundo aparte. No por mejor, sino por distinto (en caso de que fuese el mejor, jamás lo diríamos). O mejor dicho: por distinguido. Entre la mística, el derrape y el habitual quilombo del "rock nacional", Cerati daba la impresión de ser un tipo que se fue a Europa, la hizo bien y vuelve al barrio para comerse un asado con los amigos. No era un rockero más, sino alguien al que la palabra "perfección" le quedaba chica: su guitarra sonó como los dioses, su voz se escuchó como en los discos, su semblante de guitar hero era el del poster. En el contexto de Soda Stereo o en el recital spinetteano cargado de emotividad, Cerati encajaba y era la pieza más sofisticada del engranaje. Pero ese mismo profesionalismo, pasado de rosca y en escenarios menos favorables, fue el que durante algunos tramos de su carrera solista lo alejó de la gente. Por eso la devoción generalizada hacia Cerati viene con delay: recién cuando está a punto de morir, su figura alcanza el grado actual de interés social. Cerati siempre fue masivo: aunque sea a partir del segundo o tercer disco de Soda su éxito fue categórico. Pero nunca fue, por utilizar una palabra horrible que no sé si existe (y si existe no debería existir), "movilizante", en el sentido que lo son Charly García o el Indio Solari, es decir, aglutinador de sentimientos genuinos que van más allá de la admiración o el enamoramiento platónico o la compra de discos.

Durante su apogeo, Soda Stereo vendía más discos que nadie y llenaba estadios en toda América Latina, pero nadie escribía su nombre en los paredones simbólicos del gusto popular argentino. La ortodoxia rockera siempre miró a Cerati de reojo porque sintió que le faltaba mugre: hijo de una familia acomodada, ex estudiante de Publicidad, con esa pose decadentista, entre la indiferencia y el desprecio por todo lo que pasara fuera de su nube, Cerati, digamos la verdad, podía deslumbrar a nuestra homosexualidad reprimida y embobar a las chicas que nunca nos dieron la hora, pero no le caía simpático a nadie. Ni siquiera a Zeta Bosio y Charly Alberti, a quienes en los últimos años de la primera (y en realidad única) etapa de la banda, apenas les dirigía la palabra. La verdad es que nos gusta querer a nuestros ídolos porque pasaron desventuras, porque se suponía que no deberían llegar y "ahí están", porque vivieron en pensiones y almorzaron aciagas albóndigas con arroz en oscuros piringundines del conurbano. Cerati, en cambio, era lindo, cool, siempre estuvo en la cresta de la ola y si no lo estaba, parecía que sí. Tampoco se victimizó ni ventiló miserias de su vida privada para recibir el guiño del pueblo ni inventó un pasado de penurias para congraciarse con sus fans. Su combo personal era tan inalcanzable para el ciudadano medio que no lograba identificación. Los fans de Soda decían "Hey, hey, hey" cuando la banda tocaba los temas más emblemáticos... Lo paradójico del caso es que logra la ovación de todas las tribunas cuando ya no lo puede percibir.

Conozco individuos con el corazón redondo y el alma de ricota avergonzados por haberle deseado la muerte, enterados por fin de que era mejor que no se murieran ni Luca ni Cerati ni nadie, capaces incluso de reconocerle sus habilidades como guitarrista y hasta algún que otro track de Canción Animal. Es que el ACV de Cerati dejó en off side a todo el arco opositor: ¿y ahora quién es el enemigo de la barbarie? Venir de Cerati y terminar en Chano es como tomarse un colectivo en Londres y bajar en Mar de Cobo (con el respeto que tenemos por Mar de Cobo los que no conocemos Londres). Tan distinguido es Cerati que Fuerza Natural, su último disco, es el mejor de su carrera solista. Un viaje en el que el folck cósmico se confunde con el folclore y cada tanto asoma la vena lírica de Spinetta distorsionada por el ochentismo: Cerati es un continuador de Spinetta por otros medios.

En "El milagro secreto" Borges concibe a Jaromir Hladík, un escritor judío condenado a muerte durante la época del nazismo. Hladík cuenta con una obra inconclusa, Los enemigos, y la noche anterior a su fusilamiento le pide a Dios que le otorgue un año para terminarla. Dios finalmente le concede el deseo: el tiempo efímero (tic tac efímero) que pasa entre la orden y la ejecución del fusilamiento dura un año en su mente. Lo mejor que podemos pensar sobre Cerati es que le haya ocurrido (que le esté ocurriendo) el milagro secreto pero al revés: que los 3 largos años de coma inducido, en su mente hayan durado sólo un segundo.           

30 comentarios:

Dynamo dijo...

Charly es el número 1 del rock nacional. Spinetta es el padre del rock nacional. Cerati es el mejor de todos. No puedo dejar de verlo como el verdadero innovador, como un buscador de sonidos. Sin ser un reventado como Johnny Carter, también es un perseguidor. Nunca repitió fórmulas exitosas. Qué se yo, para mí es un groso y no puedo dejar de caer en lugares comunes para elogiarlo.
Me gustó el post, tiraste la posta

Dynamo dijo...

PD: estaba leyendo posts viejos tuyos de literaturra y se me cantó fijarme si entre los de rock había alguno que hable de Cerati y... justo publicaste esto! Me gustó la coincidencia y me sorprendió porque pensaba que a vos no te gustaba mucho Cerati. El que escribiste hace poco de Fito también está bueno

Dynamo dijo...

Me fui un poco al carajo con el primer comentario, me ganó el fanático jaja. Que sea innovador no quiere decir que sea mejor que todo el mundo. Soy un neurótico de mierda y tenía que hacer esta aclaración. No jodo más!

Roberto Salas dijo...

Qué bueno leer un post así sobre Cerati y sentir que los argumentos vertidos en el mismo (que pedante q estoy hoy) son los mismos que hubiese usado yo (aunq presentados con menos convicción que la tuya seguramente).

Cerati me parece un caso raro en el rock nacional, no sólo su aura de chetez y soberbia que destila muchas veces sino x cosas que no son algo que abunden en el rock vernáculo: Cerati tiene buena voz. Escuchen "11 episodios sinfónicos" y diganme quién puede cantar a ésos niveles.

Además, cuando uno conoce la discografía de Soda y solista (o sea, no conoce a la banda sólo por La MEGA) te das cuenta de la evolución de Cerati musical y letrísticamente, cómo evade estancarse en terrenos conocidos y casi siempre (nadie es perfecto) con buenos resultados.

En cuánto a decir que su mejor disco es "Fuerza natural", discrepo bastante. Prefiero "Amor amarillo", un discazo que salió en el impasse de Soda y que Cerati hizo en el estudio de su casa mientras su ex mujer estaba embarazada de su primer hijo. No soy padre, pero creo q no hay mejor muestra de la sensibilidad y júbilo de ésa etapa en un disco. Pero hablo desde el fanatismo así que olvídense cada renglón de mi comentario.

Saludos

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Cerati ha sido muy generoso con otros grupos, como cuando Soda Stereo presentó a otros grupos como soporte. Uno de los cuales fue Babasónicos.
Como lo fue con No lo soporto, participando en Soy nada, como guitarrista invitado y en Nunca iré, cantando a dúo. También el video, haciendo de piloto de un avión, donde las integrantes eran azafatas.

Billy dijo...

alto violero. muy bueno el programa.

Anónimo dijo...

Y Leo García?

rocky k dijo...

Leandro García no le gana a nadie, Anónimo, me extraña... Aguanten Los Parraleños!!!
Sobre 'Gas', diré que es un mostro.
Cuando tenía 18 años, lo negaba, como Pedro a Jesús, sistemáticamente. Pero me hago cargo de mis 18.
Con el tiempo, agrego que, en términos personales(?)me parece mucho más auténtico que el millonario reprimido de Pito Fáez (capo), y que el 'Alfredo Coto' del rock nacional: el Indio Solari.

santiago segura dijo...

Justo la semana pasada hablaba con compañeros de la facultad de lo mismo, tal cual: probablemente tuvo que pasarle esto para que se le reconozca a Cerati su inmenso talento; siempre se le encontraba el pelo en lo cool, en lo altanero y superficial que muchas veces podía ser, en el gorrito piluso, en la publicidad de Quilmes, en hacerle una canción a la Avenida Alcorta y no a la Avenida Caseros. Y mucha gente lo hacía sin haber escuchado su música. Ahora pararon la oreja y es indudable que el tipo es una bestia.

Creo que casi todos sus discos solistas son tan buenos como lo que hizo en sus días de Soda Stereo, aunque Fuerza natural no me parece el mejor (sigue siendo un gran disco). Sólo por Puente (un hit que ya escuchamos mil millones de veces y lo que quieran, pero la mejor canción que se hizo acá en los últimos 20 años) creo que me quedo con Bocanada, aunque Ahí vamos y Amor amarillo también son discos buenísimos.

En fin, diste en la tecla Martín.

Corvino dijo...

Exceptuando Siempre es hoy, que no me gusta tanto, creo que, a la distancia, todos sus discos solistas me parecen buenos. El de la sinfónica no lo escuché (y dudo que alguien lo haya escuchado entero). Como solista, en vivo, era de una frialdad terrible. Otra paradoja: Fuerza Natural es el disco más optimista de la historia del rock argentino. Saludos.

Corvino dijo...

Ah: es evidente que su punto más alto de inspiración fue en la temporada 92/93. No te digo que es un Yendo de la cama al living/Clics Modernos/Piano Bar, pero Colores Santos/Dynamo/Amor amarillo es, como diría Nuestra César, too much.

Riquelmista Nº1 dijo...

Muy bueno... un capo Cerati, una cagada que tenga que pasar por este trance de semi-muerte y mas viendo en simultaneo a tantos hijos de puta que están vivos al pedo y no le aportan nada bueno a nadie.
El tema es que Cerati no se quiso bajar nunca de la gira...

Siempre me pareció un excelente compositor y un groso con la viola. Lo que nunca me banque fue esa manera tan afrancesada de cantar que tenía. Siempre me dio la sensación de que "cantaba lindo" pero que no cantaba "desde las tripas".

Al nabo que para resaltar a Cerati tiene que bardear al Indio o a Fito Paez no entiende un culo de nada..

El calwense dijo...

Muy bueno el post. En directo siempre sonó muy bien. Un capo.

Roberto Salas dijo...

Comparto que su etapa más inspirada fue la del 92/93 con ese trío: Colores santos-Dynamo-Amor Amarillo. Es más, la década del 90' fue muy prolífica y de buena calidad. Sino revisar su discografía de ésa época: Canción Animal / Dynamo / Colores santos / Amor amarillo / Sueño Stereo / Rex mix / Comfort y música para volar / Bocanada.

Más allá de sus proyectos "extraños" como Plan V (2 discos) y Ocio que nunca escuché.

rocky k dijo...

yo entiendo la música medio que por ósmosis, por eso puedo decir que Riquelme es puto

Desocupado mental en la era del blog dijo...

Muy buen post. A mí lo que me acerca a Cerati, entre otras cosas, es lo mismo que me aleja de Fito Paez: me parece uno de los mejores cantantes que ha dado el rock criollo. Y eso, en la escena rockera nacional, es mucho decir.
Las tres voces que a mí más me gustan/me transmiten de nuestro panteón rockero son: la del Indio, la de Spinetta y la de Cerati... ah, y la de Miguel Abuelo.

Desocupado mental en la era del blog dijo...

El ránking quedaría así: 1) Indio, 2) Spinetta/Miguel Abuelo; 3) Cerati; 4) River, en la B Nacional.

Riquelmista Nº1 dijo...

Por ósmosis anal entendés vos

Anónimo dijo...

muy mono el post. muy justo.
vlt.

cacho dijo...

a mí la voz del Indio Solari me desagrada mucho. no lo puedo escuchar. Fito Paez me parece un cantante mucho más simpático, mirá lo que te digo.

después sí, Spinetta, Cerati y Miguel Abuelo sí. Emilio del Güercio es otro de los pocos buenos cantantes que tiene el rock argentino.

aguante Aquelarre!
https://www.youtube.com/watch?v=XeykW6U_fb4

rocky k dijo...

La madre de Riquelme el día que renunció a la selección: "ya sé que sos puto, m'ijito querido, pero por lo menos no sos un pelotudo". Y Román: "Sí, mamá, gracias"

Cine Braille dijo...

Hablando de rock, Corvino, mirá esto que como mínimo es provocador http://vidriospolarizados.tumblr.com/post/51518194022/el-consumo-discografico-empezo-en-esas-terrosas
Es de Luciano, el de Desierto de Ideas, creo recordar que me dijiste que a veces lo leías.

Anónimo dijo...

Chee, Quintín no es más amigo de la casa???

Anónimo dijo...

Corvinete, te puede interesar:

http://www.lanacion.com.ar/1586663-cuales-son-los-diez-escritores-imprescindibles-de-la-literatura-argentina

Corvino dijo...

Quintín jamás fue amigo de la casa, más bien todo lo contrario.

Si alguien me dice qué pasó con el blog de Maximiliano Tomás, lo agradeceré.

Saludos.

Cine Braille dijo...

Acabo de conocer la obra de Tim Minchin y no puedo dejar de compartir esto, que viene al caso:
http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=heJpPa9-be4
Y una yapa extraordinaria
http://www.youtube.com/watch?v=XIVw-eB2JGk&feature=youtu.be
De nada.

Anónimo dijo...

Lacan sostiene que sólo somos en sueÑos. Que aquello que creemos ser despiertos esta demasiado condicionado como para llamarse existencia. Esto lo entendí con Cerati. Una voz prolija que me perturba. Si hay alguien que logra llevarme alli donde los sueños dominan son sus sonidos, su voz espectral, su fuerza poco natural. No se si es mejor o peor que otros. No me da placer andar midiendo. Esas son cosas de los andan muy despiertos

Cadenet dijo...

¡Qué loco! Coincido bastante, aunque no del todo. Parece que a vos te gusta mucho, mucho. Y... ojo... creo que con Charly pasa algo más o menos parecido, porque en su caso la falopa, la locura y todo lo demás no son las "salidas de un pobre tipo" sino otra cosa, una suerte de desprecio, ese que le atribuís (muy justamente) a Cerati. Saludos.

Anónimo dijo...

Hablan de cantantes...se ve que nunca escucharon a Javier Martinez, Alejandro Medina, Carlos Mellino, Lebon en su buena epoca (y me deben faltar varios que ahora no recuerdo)
Les falta tomar sopa de rock nenes...

Gabriel Frenkel dijo...

Muy frío y como dijo Corvino, le falta mugre. El rock es otra cosa. Así como Pappo dijo que Serú Girán vino a ablandar la milanesa, podría decirse que Cerati la convirtió en sushi.